El Ayuntamiento de Granada socilita el visto bueno para el aparcamiento del Realejo ideal.es

Las delegaciones de Cultura y Obras Públicas de la Junta replican que solo tiene que presentar el proyecto con las correcciones que se hicieron 

M. V. COBO | GRANADA

El proyecto de construir un aparcamiento de 325 plazas en la calle Santiago, en el barrio del Realejo, lleva 'congelado' desde el año 2009. Las delegaciones de Cultura y Obras Públicas de la Junta de Andalucía tenían que dar el visto bueno al estacionamiento y a la ampliación del colegio situado en esa calle, pero ambas dijeron que no. Así lo denunció ayer la concejala de Urbanismo, Isabel Nieto. Sin embargo, el delegado de Cultura afirmó que solo se les hizo una consulta y que no han vuelto a ver el proyecto con las correcciones que plantearon. Un nuevo capítulo de la falta de entendimiento que protagonizan desde hace años el Consistorio y la Junta.

La concejala de Urbanismo de la capital, Isabel Nieto, señaló ayer en rueda de prensa que la Junta tiene paralizadas las innovaciones del PGOU y del Plan Centro que permitirían construir este aparcamiento subterráneo, «un proyecto de interés público» por las necesidades que tiene el barrio, según alegó la edil.

Las pegas

«En 2010 ya se corrigieron algunas pegas que Cultura nos puso», apuntó Nieto, como la ampliación del colegio, que pese a haber solicitado dos plantas, se quedó en una. Sin embargo, posteriormente y «fuera de plazo», tanto Cultura como Obras Públicas emitieron informes desfavorables.

La primera alegó que colocar una entrada de 'parking' impediría que los escolares pudieran disfrutar de la plaza proyectada sobre el estacionamiento subterráneo. «En Trajano hay una plaza con un aparcamiento y eso no impide que los escolares de Maristas disfruten de la plaza», se lamentó Nieto, argumentando que Cultura «no se pronunció sobre asuntos patrimoniales, que es su competencia».

La edil explicó que en la parcela está prevista una vivienda unifamiliar aislada, rodeada de jardines, proyecto que no permitiría hacer la plaza si no tienen permiso de Cultura. «Si no nos permiten la modificación parcelaria, no podemos hacer la plaza pública de setecientos metros», se quejó la concejala, que apuntó que esa vivienda pasaría de estar aislada a quedar alineada en un extremo de la parcela, lo que dejaría libre el resto del terreno para hacer la plaza y unirla al patio del colegio. «En la plaza de la Romanilla se ha hecho para el Centro Lorca», expuso a modo de ejemplo Isabel Nieto, lamentando que esta delegación, a su juicio «es discrecional, a veces dice que sí y a veces que no», aunque los proyectos sean similares.

Nieto explicó que además deben subsanar los problemas de Obras Públicas, que emitió un informe «más difícil de solucionar». Obras Públicas de la Junta debería permitir que se construyeran las cuatro plantas subterráneas, ya que «solo se ha autorizado una planta junto a la vivienda, lo que hace inviable el aparcamiento».

La concejal señaló que este problema ya se planteó en el pleno de la corporación municipal y todos los grupos estuvieron de acuerdo en hacer las modificaciones y sacar adelante el proyecto.

Benzal responde

El delegado de Cultura, Pedro Benzal, se mostró ayer sorprendido por las quejas municipales, ya que, según explicó, solo habían recibido una consulta sobre la viabilidad de hacer el aparcamiento y ellos presentaron una serie de correcciones. «Después de eso vino el promotor con el grupo municipal socialista, se le explicaron las modificaciones y se fue muy agradecido. Sabemos que ha presentado un nuevo proyecto corregido en Urbanismo, pero nunca nos lo han mandado. Y no podemos aprobar algo que ni hemos visto».

Benzal se lamentó de la «ceremonia de la confusión» en la que, a su juicio, sume el Consistorio a los ciudadanos. «El planeamiento actual permite hacer un aparcamiento en el Ave María, ¿por qué no lo hacen?», espetó Benzal.

El delegado de Cultura de la Junta de Andalucía le lanzó un mensaje a Nieto: «Yo estoy a favor de que se haga un aparcamiento en el Realejo; lo que pasa es que los niños y los coches no pueden entrar por el mismo sitio, eso hay que corregirlo».