Lo dijo la Organización Mundial de la Salud, OMS. En el mundo, la gente utiliza mal los antibióticos, tanto, que inclusive atacan con ellos malestares comunes, como un resfriado o un dolor de garganta. Obrando así pierden algo más que plata y tiempo.
Hay que advertirlo de entrada. De acuerdo con los especialistas, los antibióticos se usan para combatir las bacterias. De manera que si a usted no le han hecho pruebas ni le han detectado en el organismo la presencia de una de ellas, pues sencillamente no tome ese tipo de medicamento. La razón es simple: si usted los ingiere cuando no los requiere, el día que de verdad los necesite la bacteria se podría morir, pero de la risa, porque a lo mejor solo cosquillas le produciría.
Lo más curioso es que la gente lo sabe y a pesar de ello sigue incurriendo en tan nociva práctica. En efecto, la OMS entrevistó a cerca de 10.000 personas en 12 países. El 64 por ciento de los consultados, “dicen saber que la resistencia a los antibióticos es un problema que podría afectarlos a ellos y a sus familias”, pero no entienden bien la forma en que los afecta y lo que podrían hacer para evitar el problema.
A manera de ejemplo, la OMS destaca que “64 por ciento de los entrevistados piensan que los antibióticos pueden usarse para tratar los resfriados y la gripe, pese a que los antibióticos no tienen ningún efecto en los virus de la gripe”.
Otro 32 por ciento de los entrevistados confesaron una práctica que poco les favorece: que dejan de lado los antibióticos cuando se sienten mejor, frustrando así una sólida recuperación al no culminar el tratamiento.
Al presentar los resultados de la encuesta, la directora General de la OMS, Margaret Chan, señaló que “el aumento de la resistencia a los antibióticos es una crisis de salud mundial y, en la actualidad, los Gobiernos lo reconocen como uno de los principales retos para la salud pública. En todas partes del mundo está llegando a niveles peligrosamente altos”. Agregó que, esa resistencia a los antibióticos, “está poniendo en peligro nuestra capacidad para tratar las enfermedades infecciosas y socavando muchos adelantos de la medicina”.
No es un juego
El médico Carlos Alberto Restrepo Molina, director General de la clínica de la Universidad Pontificia Bolivariana, UPB, resaltó que los pacientes generalmente asocian el éxito de una consulta con el número de medicamentos y de exámenes que les manden. De manera que si, por ejemplo, no les recetan alguna medicina, consideran que “el médico es muy malo”. Y, si tienen un cuadro viral y el médico les dijo que tomaran mucho líquido, lo que normalmente se piensa es “agh, perdí el tiempo”.
De ahí a la costumbre de automedicarse hay un solo paso. Por el voz a voz, la gente dice, “si tenés esto, tomate esta medicina con la que yo me alivié”. O algún familiar, compañero de oficina o vecino les da un medicamento que les quedó de su último tratamiento, sin ver siquiera si es apropiado o si está vigente.
Restrepo confirmó que es muy frecuente que, para problemas virales, la gente tome antibióticos, llevados por la creencia de que, como son más fuertes, acabarán con la dolencia o enfermedad en un santiamén. Una infección viral, anotó, requiere una atención sintomática, o sea de sus síntomas, llámese fiebre, dolor de garganta o de todo el cuerpo.
En cambio, si se está en presencia de una infección bacteriana, lo recomendable es ponerse en manos de un especialista que le indique la cantidad, la dosis y el tiempo durante el cual debe tomar el antibiótico que se acomoda al perfil de la bacteria detectada.
El médico afirmó que entre los casos más frecuentes, y erróneos, del uso de antibióticos sobresale el combate de la gripa, para la que mucha gente acude a los llamados “matrimonios”, o sea la combinación de un analgésico con una amoxicilina, por ejemplo.
Otros “matrimonios” se usan para atacar las faringitis o laringitis, las cuales, dijo el médico, en un 70 por ciento de los casos pueden ser virales.
Vuelven los 'jubilados'
El inapropiado uso de los antibióticos no es nuevo. El pediatra y docente Marco Arango Rico, recordó que desde 1928, cuando Fleming descubrió la penicilina, hasta fines de la década de los 80, se vivió la edad dorada de los antibióticos. De ahí en adelante, no son muchos los que han aparecido.
En su apogeo, la gente pensó que servían para todas las enfermedades. Eso produjo efectos indeseables, que llevaron a que se dejaran de lado algunos de ellos. También afloró el fantasma de la resistencia, que en palabras sencillas es como si las bacterias le ganaran la batalla a los antibióticos.
En eso, indicó Arango Rico, influyen muchas cosas: una mala prescripción de los médicos, la automedicación de los pacientes, su formulación por la mamá, la abuela o amigos que comparten el poquito de medicamento que les sobró de un tratamiento y, muy frecuente también, la receta por parte de un farmacéuta.
El especialista enfatizó en que durante la última década han surgido menos de 12 antibióticos nuevos, que sean útiles, y para estos también hay resistencia. Por eso se están desempolvando antibióticos que se habían “jubilado”, pero purificados y con menos efectos indeseables.
Otros resultados del estudio de la OMS
76% de los entrevistados piensa que el cuerpo se vuelve resistente a los medicamentos. No. Es la bacteria.
44% piensa que esa resistencia es solo un problema para quienes toman antibióticos con regularidad. Falso. Cualquier persona puede contraer una infección resistente a los antibióticos.
57% piensa que no puede hacer mucho para detener la resistencia a los antibióticos y 64% cree que los expertos resolverán el problema antes de que se vuelva demasiado grave.
73% de los entrevistados dicen que los agricultores deberían darles menos antibióticos a los animales productores de alimentos.
Ante realidades como esta, la OMS tiene una campaña a nivel mundial, denominada “Antibióticos: manéjalos con cuidado”. La primera semana de concientización tuvo lugar entre el 16 y el 22 de noviembre de 2015.
Este contenido ha sido publicado originalmente en Vanguardia.com en la siguiente dirección: http://www.vanguardia.com/entretenimiento/salud/344626-la-oms-advierte-sobre-el-uso-indebido-de-los-antibioticos. Si está pensando en hacer uso del mismo, recuerde que es obligación legal citar la fuente y por favor haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. Vanguardia.com - Galvis Ramírez y Cía. S.A.
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